Durante el puente te sugerimos que realices el Camino Lebaniego hasta El Monasterio de Santo Toribio de Liébana, una preciosa ruta que atraviesa Cantabria y forma parte del llamado ‘Camino de la Costa’ que, según los manuscritos, era muy transitado en la Edad Media.
Lo que te planteamos es que disfrutes de la última parte del recorrido desde Quintanilla de Lamasón cruzando la localidad de Cicera, por el Collado de Arceón, hasta llegar a Lebeña, donde se encuentra la Iglesia de Santa María, una de las mejores representaciones del mozárabe español en Cantabria, un recorrido entre exuberante naturaleza con pronunciados desniveles.
En tu camino hacia Potes, capital de la comarca lebaniega y uno de los núcleos turísticos más importantes de Cantabria, debes pasar por Cillorigo, y por Tama donde existe una senda paralela a la carretera que discurre junto al río Deva y por el que se puede disfrutar de toda la belleza de los prados lebaniegos.
Junto a Potes, en la localidad de Turieno, se encuentra el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, fundado en el siglo Vll, y considerado el monasterio más antiguo de España donde el culto se ha mantenido ininterrumpidamente.
El Monasterio fue un importante centro de pensamiento de su época, destacando la figura de Beato de Liébana, autor de los Comentarios al Apocalipsis de San Juan, en el siglo Vlll. En la actualidad es un importante centro de peregrinación católico, por bula del Papa Julio ll, junto a Roma, Jerusalén y Santiago de Compostela, es uno de los cuatro lugares santos donde un peregrino puede ganar el Jubileo.
A diferencia del resto, que se realizan con periodicidad fija, el Jubileo Lebaniego sólo se celebra cuando la festividad de Santo Toribio, el 16 de abril, cae en domingo.
Durante el Año Santo los fieles acuden a venerar la reliquia del Lignum Crucis, el fragmento más grande que se conserva de la Cruz de Cristo, y se ganan el Jubileo accediendo por la Puerta del Perdón.
Aunque para el próximo año Jubilar no será hasta el 2017, esta fantástica jornada hará que te enamores de Liébana y experimentes este remanso idílico de paz y naturaleza, que ya de por sí merece la visita.
Y será aún mejor si además al terminar disfrutas de todas la comodidades y atenciones del Hotel Casona Malvasía…
